¡La eterna clepsidra de la existencia dará vueltas incesantemente, y tú con ella, polvo del polvo! F. Nietzsche (La Gaya Ciencia) De pronto una luz nos confunde. Besa un jardín, una rosa. Descoloca un tiempo mal vivido… Y se confiesa al resplandor la sombra que provoca. Piensa la oscuridad, hace memoria de un entonces sin ser, ninguneado, confuso, disponible en otra historia; inesperadamente iluminado. Un entonces que el alma no sabía y cree saber de pronto, sin paisaje ni calendario ni lugar ni día; un nunca de ontológico coraje... Mientras, la luz eterna y sile...