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Por esa calle, húmeda y gris, andaba
un verbo tropezando con el mundo.
Por esa calle de diciembre, o siempre,
que tiene el nombre propio de cualquiera
distraído en las letras de la vida.
Por el ruido de fondo de los hombres
y la rara aventura del silencio
que el invierno recoge de la lluvia.
Por esa calle –frente a mí o los otros–,
húmeda y gris –ajenos, displicentes–,
un verbo regresaba...
.........................................Sólo había
una acera incapaz de conjugarlo.
23 diciembre 2010
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Por esa calle, húmeda y gris, andaba
un verbo tropezando con el mundo.
Por esa calle de diciembre, o siempre,
que tiene el nombre propio de cualquiera
distraído en las letras de la vida.
Por el ruido de fondo de los hombres
y la rara aventura del silencio
que el invierno recoge de la lluvia.
Por esa calle –frente a mí o los otros–,
húmeda y gris –ajenos, displicentes–,
un verbo regresaba...
.........................................Sólo había
una acera incapaz de conjugarlo.
23 diciembre 2010
Al fin el mundo tropieza siempre con el Verbo
ResponderEliminarFeliz Navidad Antonio
Muchas gracias por tus visitas, siempre. Y...
ResponderEliminarFeliz Navidad, Capitán.
Por supuesto, Arainfinitum.
ResponderEliminarFeliz Navidad.
Un Verbo que regresa siempre, aunque siempre acabemos traicionándolo -ajenos, displicentes. Qué moral y qué misterio.
ResponderEliminarRegresa por gente como tú, estoy convencida.
Un beso.
¡… entonces tiene más moral que el Alcoyano!
ResponderEliminarGracias, Olga, por tu leal compañía.
Un beso fuerte y feliz Navidad.
Ando últimamente que no sé dónde acudir, leyendo a destiempo a quienes merecen ser leídos con puntualidad, pero es lo que hay.
ResponderEliminarTus versos, como siempre, con esa alegre tristeza que termina arrancándote una sonrisa al releerlos... Tu entrada anterior, de las mejores que te he leído, Antonio.
Feliz Navidad y un fuerte abrazo
¡Yo sí que ando desnortado, amigo Tato, de un tiempo a esta parte! A ver si estas fechas, en que se ve una estrella con decisión de GPS, me centran nuevamente.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras. Y sé feliz en Navidad y después de Navidad, en un larguísimo después que quiera seguir siendo Navidad.
Un fuerte abrazo.
Dias de encuentros,en este mundo de desencuentros.
ResponderEliminarTe deseo mucha felicidad y alegria.
Un beso Navideño.
Gracias, Veridiana.
ResponderEliminarYo te deseo que no encuentres ningún desencuentro y que todos tus encuentros sean felicísimos.
Un Beso.
A pesar de esa calle que no supo conjugar el Verbo, a pesar del frío, a pesar del ruido y tanta gente sacando la lengua porque va muy deprisa y los que se impacientan en las colas de los supermercados... A pesar de todo y con todo...¡¡¡FELIZ NAVIDAD, ANTONIO!!!
ResponderEliminarUn abrazo, profesor
Muchas gracias, Sunsi. Y Feliz Navidad, por supuesto.
ResponderEliminarA mí me siguen gustando estas fechas, a pesar de las espinas que con los años me han ido entrando.
Un abrazo; cordial, ya sabes.