En Coslada, Madrid, a veintinueve
días de una ciudad en la que aún sueño,
mientras abril sobre otras calles llueve
por donde sólo van sombras sin dueño.
La noche es día, la mañana es tarde:
mi ciudad ya no es más que un sinsentido,
un tiempo muerto en un reloj cobarde
sin hálito en las horas ni latido.
En Coslada, Madrid, de vez en cuando
imagino lejanos alborotos
y niños que regresan correteando
de ayeres dulces sin futuros rotos…
¡Y aún sueño esa ciudad cada mañana
en Coslada, Madrid, tras mi ventana!
Coslada 13 de abril de
2020
La sin razón, la pérdida, la tristeza y el desencanto y mucho más allá: la esperanza.
ResponderEliminar" Y si la nada invade la mirada, arrojad la mirada más allá, mucho más".
Gracias por estar ahí. Por acompañar, Por tu solidaridad y por aportar con la belleza de tus poemas un bálsamo en estas horas oscuras.
Un beso agradecido.
Gracias, Susi. Lo fundamental es eso: "Tener una esperanza que esperar"
EliminarBesos
Gracias !
ResponderEliminarAngélica
Gracias ti, Angélica.
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